LA
FIEC Y SU PAPEL EN EL SECTOR CONSTRUCTIVO. REPRESENTATIVIDAD Y MISIÓN
Con 32 federaciones
nacionales que agrupan a empresas de construcción en 27 países
europeos (incluyendo 24 países de la Unión Europea, Noruega,
Suiza y Ucrania), la FIEC representa a empresas de todas las dimensiones
y especialidades, desde artesanos autónomos y pymes hasta grandes
grupos internacionales. Gracias a esta amplia representatividad, la entidad
es el Socio Social oficialmente reconocido en el Diálogo Social
Sectorial de la construcción. Su misión abarca aspectos esenciales
como:
Representación
y promoción: Defender y promover los intereses de la industria constructiva
frente a las instituciones europeas, aumentando el conocimiento del sector
tanto entre los responsables políticos como entre el público.
Desarrollo
sostenible: Impulsar prácticas que faciliten la transición
ecológica y la consecución de los objetivos del Green Deal
de la UE.
Competitividad
y simplificación: Abogar por un sistema de contratación pública
que asegure igualdad de condiciones para todas las empresas del sector,
y proponer la revisión de normas que obstaculicen la producción
de vivienda.
Colaboración
y mejora de condiciones: Trabajar conjuntamente, como Socio Social, con
la Federación Europea de Trabajadores de la Construcción
y la Madera (EFBWW) para mejorar las condiciones laborales, la seguridad
y la formación, así como fomentar el intercambio de buenas
prácticas y la adopción de nuevas tecnologías.
LA CRISIS HABITACIONAL:
DATOS Y DESAFÍOS
En el último
lustro se ha registrado una notable disminución en la actividad
del sector residencial en diversos Estados miembros de la UE. Las cifras
más recientes revelan que:
La construcción
y renovación de viviendas descendió un 2,6% en 2023 y se
prevé una caída adicional de 5,7% en 2024.
Entre 2010
y 2022, el importe de las rentas de vivienda se incrementó, en promedio,
un 18%, mientras que los precios de la vivienda subieron un 47%.
Un 10,6% de
los hogares en las ciudades europeas dedicaban más del 40% de su
renta disponible al pago de vivienda.
Estos datos
reflejan el agravamiento de una situación ya crítica, donde
el encarecimiento del coste de la construcción se suma a problemas
estructurales como la escasez de suelo en las zonas urbanas y una legislación
urbanística que tarda en adaptarse a las nuevas necesidades del
mercado.
CAUSAS DEL
AUMENTO DE LOS COSTES
El impacto
de la pandemia del COVID-19 sobre las cadenas de suministro, el marcado
aumento de los precios de la energía y las disrupciones asociadas
al conflicto en Ucrania han contribuido al encarecimiento de los insumos
y a la interrupción de los procesos constructivos. A este escenario
se suman los elevados costes laborales y el alto precio de adquisición
de terrenos, que en áreas de alta demanda pueden constituir entre
el 50% y el 60% del precio final de la vivienda. Asimismo, la subida abrupta
del tipo de interés, que se cuadruplicó en apenas un año,
ha dificultado el acceso a financiación y encarecido aún
más el coste global de los proyectos constructivos.
NUEVAS PROPOSTAS
Y LA INTERVENCIÓN EUROPEA
UN NUEVO ENFOQUE
DESDE LA UE
Aunque la política
de vivienda es competencia de los Estados miembros, la dimensión
del problema ha impulsado una intervención más directa a
nivel comunitario. Por primera vez, la cartera de la Comisión Europea
incorpora la vivienda como un elemento estratégico. La presidenta
de la Comisión, Ursula von der Leyen, subrayó la necesidad
de actuar frente a la crisis habitacional en sus directrices políticas
de julio de 2024, y designó al danés Dan Jorgensen como Comisionado
de Energía y Vivienda. Su mandato incluye la elaboración
de un plan europeo de vivienda asequible y una nueva estrategia orientada
a:
Aumentar la
oferta de vivienda: A través de medidas que agilicen los procesos
administrativos y revisen las normativas que afectan al sector.
Reducción
de costes: Mediante la promoción de la construcción en serie
e industrial, lo que permitiría acelerar la producción, reducir
el coste de edificación y elevar la calidad.
Mejorar el
acceso al crédito: Con medidas financieras y fiscales que faciliten
a los hogares, especialmente a los jóvenes, la obtención
de préstamos hipotecarios.
El Comisionado
contará con el apoyo estratégico de un Task Force especializado
y la financiación de la Banca de Inversiones Europea (EIB), mientras
que en el Parlamento Europeo se ha conformado una Comisión Especial
sobre la crisis de la vivienda, presidida por la eurodiputada italiana
Irene Tinagli. Esta comisión se encargará de identificar
barreras, proponer reformas y recomendar medidas que potencien la productividad
y competitividad del sector constructivo.
PROPUESTAS
DE LA FIEC: UN PLAN EUROPEO DE VIVIENDA ASEQUIBLE
En su posición
publicada en diciembre de 2024, la FIEC subrayó la urgente necesidad
de una respuesta coordinada a nivel europeo para paliar el déficit
de viviendas asequibles y sostenibles. Entre sus propuestas destacan:
Revisión
del entorno regulatorio: Incentivar una simplificación de las normas
y los procesos administrativos que afectan a los mercados de vivienda,
eliminando trabas burocráticas que ralentizan la producción.
Impulso a la
construcción en serie: Fomentar la industrialización del
proceso constructivo para mejorar la productividad, acortar plazos y reducir
costes.
Facilitar el
acceso a la financiación: Proponer la flexibilización de
los requisitos prudenciales establecidos por Basilea III para hacer más
atractiva la inversión en proyectos de vivienda, garantizando que
este sector no se considere de mayor riesgo que otras actividades productivas.
Incentivar
la inversión privada y pública: Promover medidas fiscales
y financieras que favorezcan la inversión en el mercado de la vivienda,
ampliando las posibilidades para inversores y familias.
Estas iniciativas
pretenden, en conjunto, proporcionar un impulso decisivo al sector de la
construcción, equilibrando la oferta y la demanda y, en última
instancia, asegurando que todos los ciudadanos europeos dispongan de viviendas
dignas y asequibles.
CONCLUSIONES
La construcción
de viviendas adecuadas, sostenibles y asequibles se sitúa como uno
de los mayores desafíos urbanos de Europa. La coordinación
entre la Unión Europea y los Estados miembros, la modernización
del marco regulatorio y la adopción de nuevas tecnologías
en la construcción son elementos esenciales para revertir la tendencia
a la baja en la actividad constructiva y contrarrestar el incremento desproporcionado
de los precios.
La acción
conjunta de actores institucionales y del sector privado, liderada por
propuestas como el "Plan Europeo de Vivienda Asequible" de la FIEC, supone
una respuesta integral ante un problema que afecta tanto la cohesión
social como el crecimiento económico. Las medidas propuestas y la
nueva estrategia de la Comisión Europea abren el camino hacia un
futuro en el que la vivienda sea accesible, segura y respetuosa con el
medio ambiente, adaptándose a las necesidades de una población
que envejece y a una dinámica urbana en constante transformación.
Autoría:
David Sanz – Especialista en Infraestructuras Comerciales y Consultor en
Riesgos Geológicos con años de experiencia internacional.
Se invita a
los lectores a compartir este artículo en sus redes sociales y a
participar en la conversación, aportando sus opiniones y sugerencias
sobre las medidas necesarias para garantizar viviendas asequibles en Europa.
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