La construcción industrializada se presenta no solo como una opción, sino como una inevitabilidad "por amor o por dolor". La jubilación de una generación de trabajadores clave en el sector de la construcción plantea un "problema grave" para el futuro inmediato. La realidad es que, en un plazo de cinco a diez años, un porcentaje considerable de estos profesionales desaparecerá, y actualmente no existe una sustitución adecuada para ellos. La industrialización emerge como la única solución viable para asegurar la continuidad y el desarrollo del sector en España.

Para aquellos interesados en profundizar en el tema de la financiación de la construcción industrializada, se recomienda la guía práctica de inmoley.com. Este recurso ofrece una visión completa sobre cómo superar los desafíos financieros asociados a la industrialización de los procesos constructivos, proporcionando estrategias prácticas para navegar por el complejo panorama regulatorio y financiero.

La adopción de la construcción industrializada en España es un imperativo no solo para afrontar la escasez de mano de obra y mejorar la productividad, sino también para impulsar la innovación y la sostenibilidad en el sector. La modificación de las normativas actuales para facilitar la financiación de estos proyectos es un paso crucial en este proceso de transformación. A medida que España avanza hacia un modelo de construcción más avanzado, la colaboración entre el sector público, las instituciones financieras y los profesionales de la construcción será fundamental para asegurar el éxito de esta transición.