Es necesario
asegurarse de que la cláusula de daños se modifique para
reflejar las secciones y que el cálculo resultante funcione. Si
el mecanismo de cálculo no funciona, las provisiones de daños
liquidados fallarán por incertidumbre y el propietario deberá
recurrir a daños generales (lo que tampoco siempre favorece al contratista).
Otras cláusulas contractuales que pueden requerir una redacción
detallada incluyen los detalles de cualquier plan de reparación
y cualquier enmienda consiguiente a las disposiciones de adquisición
y seguros.
LINE IN DE
SAND. LÍNEA DE ARENA
En términos
legales, la expresión “line in the sand” el de un punto más
allá del cual, una vez tomada la decisión de ir más
allá, la decisión y sus consecuencias resultantes se deciden
de forma permanente e irreversible. Un ejemplo sería comprometer
fondos para completar un proyecto (en contraposición al aplazamiento
o cancelación). Una vez comprometidos, los fondos no se pueden gastar
en otra actividad y el proyecto tendrá éxito o fracasará.
Las empresas
constructoras deben formalizar los llamados acuerdos de “line in the sand”
'línea en la arena' a los que lleguen y que restablezcan su relación
comercial y contractual en la mitad de los proyectos importantes.
Es común
en muchos proyectos de construcción grandes que se llevan a cabo
durante varios años que las partes deciden resolver los problemas
que surgen mediante un acuerdo, pero que pueden resultar en cambios en
los términos del acuerdo, que luego deben documentarse cuidadosamente.
Puede ser un
desafío documentar con precisión y precisión esos
cambios de una manera que modifique el acuerdo en la forma en que las partes
pretenden y permitan que se resuelvan las diferencias históricas.
Por lo tanto, hay cosas importantes que las empresas de construcción
deben considerar al acordar cambios y escollos comunes que deben evitarse.
Para proyectos
complejos, con un alto grado de gestión de cambios, es relativamente
común que las partes de un acuerdo de construcción experimenten
dificultades para mantenerse al día con los requisitos de gestión
de cambios, particularmente asuntos relacionados con el programa y el coste.
Tales dificultades se encuentran a menudo en las primeras etapas del proyecto
con muchos meses, si no años, antes de su finalización. Si
bien el acuerdo asignará el riesgo a una u otra de las partes por
los desafíos encontrados, a menudo llegará un punto en el
que todos los involucrados desearán superar los problemas históricos,
con el deseo de 'restablecer' la posición comercial y acordar cambios
al acuerdo.
En este punto,
existe la tentación de acordar modificaciones informales al acuerdo,
pero esa informalidad a menudo conduce a una considerable incertidumbre
comercial y contractual con un riesgo significativo para ambas partes.
En esas circunstancias, es mejor formalizar los acuerdos de las partes
sobre estas cuestiones contractuales y comerciales mediante una enmienda
formal al acuerdo existente. Estos acuerdos a menudo se denominan acuerdos
de "línea en la arena" porque combinan un acuerdo de reclamaciones
históricas, hasta una fecha acordada, con modificaciones a los términos
del acuerdo a partir de ese momento.
Negociar y
documentar los acuerdos de la línea en la arena puede ser un proceso
prolongado, ya que los eventos sobre el terreno pueden superar fácilmente
el progreso de las negociaciones. Una vez que se alcanza un acuerdo, a
menudo es prudente organizar la ejecución con prontitud.
Los acuerdos
de línea en la arena representan tanto una oportunidad como un riesgo
importantes. Esos acuerdos permiten una actualización del acuerdo
para alinearlo con las realidades actualizadas del proyecto y ayudan a
trazar una línea sobre los eventos pasados, lo que permite a las
partes enfocarse en los desafíos futuros.
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