El destino
donde los extranjeros residentes representaron el peso más elevado
(19% de las compras de vivienda totales de la provincia) fue Santa Cruz
de Tenerife, seguido de Islas Baleares (16%), Alicante (15%) y Las Palmas
(14%).
El precio medio
por metro cuadrado de las operaciones realizadas por extranjeros residentes
en el periodo de 2014 a 2019 fue un 4% superior al de las efectuadas por
compradores nacionales en el mismo periodo.
Sin embargo,
existe gran disparidad por provincias: mientras que, en la mayoría,
el precio medio por metro cuadrado pagado por los extranjeros residentes
en el período de recuperación económica se situó
por debajo de lo pagado por los nacionales, en las provincias de Santa
Cruz de Tenerife, Barcelona e Islas Baleares los precios medios por metro
cuadrado de las operaciones realizadas por extranjeros residentes fueron
más de un 10% superiores a los de las realizadas por los inversores
nacionales. Estas diferencias son probablemente reflejo del diferente perfil
inversor en las diferentes provincias. En las de la costa mediterránea
y en las islas tienen seguramente un peso más elevado los inversores
extranjeros con rentas altas, que demandan viviendas de mayor calidad y
situadas en mejores zonas.
Un segundo
indicador para medir la actividad de los extranjeros en el mercado inmobiliario
residencial español son las compras netas sobre el stock de vivienda.
Este indicador muestra también un aumento continuado de la inversión
neta de los extranjeros residentes en España durante la etapa de
recuperación económica. Por otra parte, el signo positivo
de este indicador refleja que el stock de vivienda en manos de extranjeros
residentes ha aumentado ininterrumpidamente desde 2007, y se ha acelerado
desde 2014. Así, en 2019 las compras netas de los extranjeros residentes
supusieron casi el 0,2% del stock de vivienda, casi tres veces más
que en 2013. En 2019, los países comunitarios y Noruega representaron
el 45% de las compras netas, destacando en ellos el peso de Rumanía
(15%) y de Italia (8%). Entre las nacionalidades no comunitarias, destaca
el peso de los marroquíes, las compras netas de los cuales representaron
en 2019 el 17% de las realizadas por todos los extranjeros residentes.
En el caso del Reino Unido, su peso ha sido reducido durante los últimos
años y el número de operaciones de compra de los británicos
ha venido acompañado de una cifra también cuantiosa de ventas
por parte de ciudadanos de esta nacionalidad.
Las compras
por parte de extranjeros presentaron una elevada dispersión provincial.
En particular, los pesos más elevados de compras netas sobre stock
de vivienda se encontraban en las islas, el litoral mediterráneo
y las provincias de Madrid y Barcelona, situándose el máximo
en la provincia de Islas Baleares, con un 1,4%. Sin embargo, las contribuciones
positivas de los extranjeros al crecimiento de la población se han
concentrado en las provincias insulares.
Actividad de
los extranjeros no residentes en España Las compras de vivienda
por parte de extranjeros no residentes sobre las compras de vivienda totales
en España, que representaban un 3,3% entre 2007 y 2010, se incrementaron
hasta alcanzar el 10, 5% en 2014. Desde entonces, este porcentaje ha disminuido
gradualmente, hasta situarse en el 7,8% 2019.
Este menor
peso en la compra de vivienda durante la recuperación por parte
de los no residentes contrasta con la evolución positiva observada
anteriormente en el grupo de extranjeros residentes.
Los países
europeos de rentas elevadas concentran el grueso de estas compras. En la
media del periodo de recuperación económica, el 84% de las
compras de los extranjeros no residentes corresponde a los países
comunitarios (incluido el Reino Unido) y en Noruega. Dentro de este grupo,
los británicos fueron la nacionalidad con la proporción más
elevada de compras (23%) entre 2014 y 2019. Sin embargo, su peso relativo
disminuyó respecto a 2007, al incrementarse el de otras nacionalidades,
como los alemanes y franceses (12% de las compras totales de no residentes
2019 en ambos casos), los belgas (10%) o los suecos (8%).
El destino
donde las compras de extranjeros no residentes representaron el peso más
elevado fue Alicante (un 38% de las compras totales de la provincia), seguido
de Málaga (28%) y Santa Cruz de Tenerife (25%).
Las compras
netas de extranjeros no residentes corresponden fundamentalmente a los
países europeos de rentas altas. Dentro de estos, se sitúan
Bélgica, Suecia y Francia como los países con más
compradores netos en 2019. Los británicos, que en 2007 constituían
la nacionalidad con una proporción más elevada, disminuyeron
sus tenencias de vivienda en España durante la crisis económica,
en un contexto de devaluación de la libra, registrando entre 2009
y 2013 compras netas negativas. Aunque con la recuperación económica
las compras británicas presentaron de nuevo un signo positivo, factores
como la incertidumbre en torno a la salida de su país de la Unión
Europea, han podido propiciar que, entre 2017 y 2019, las ventas de vivienda
de los británicos no residentes hayan superado de nuevo a sus compras
en España.
Las compras
por extranjeros no residentes entre 2014 y 2.019 se concentraron también,
a las provincias de la costa mediterránea y en las islas destacando
la provincia de Alicante, donde un 3% del stock de vivienda fue adquirida
por extranjeros no residentes , seguido de Málaga (2,1%) y Las Islas
Baleares (1,3%).
MANTENIMIENTO
DE LA OBRA INICIADA EN CATALUÑA 2019
Desde 2013,
punto de referencia de mínimo histórico en la producción
de las viviendas iniciadas, la actividad del sector no había vuelto
atrás ni para coger impulso. El cierre de 2018 mostró por
quinto año consecutivo, la mejora suave en cuanto a los valores
absolutos pero importante en valores relativos, con incrementos por encima
del 25% anuales. El último año 2019, ante las últimas
normativas legislativas estatales, autonómicas y locales- y la incertidumbre
jurídica que provocaron, el escenario cambió y el ritmo de
construcción, también. 2019 en Cataluña se iniciaron
un total de 14.549 viviendas, lo que supone un mantenimiento absoluto de
la producción de un año antes (+ 0,2%).
Este suave
ritmo, viene provocado principalmente por el comportamiento de la actividad
constructora dentro de la provincia de Barcelona.
La provincia
de Barcelona a pesar de ser la más productiva en cuanto a valores
absolutos iniciando a lo largo de 2019 un total de 11.086 viviendas, es
decir, el 76,2% de del total de la obra iniciada en Cataluña, representa
una disminución anual del 3,1% seguida de la provincia de Lleida
que disminuye ligeramente (-0,9%), el resto de provincias de la comunidad
catalana, aumentan su producción destacando Tarragona, que inició
1.275 viviendas, lo que supone un incremento del 36,9% interanual, seguida
de Girona, más cercana a la producción total de Tarragona,
con 1.530 viviendas iniciadas al año y un aumento del 3,7%, en comparación
con los datos del año anterior.
Por ámbitos
territoriales de Cataluña, es el ámbito Metropolitano el
que presenta el grueso de la producción con 9.833 viviendas iniciadas
el 2019 (68% del total) y presenta una disminución del 4,6% de las
viviendas en comparación con el año anterior. Esta trayectoria
descendente, también lo han sufrido los ámbitos de las Tierras
del Ebro y el de Poniente, con una disminución anual del 30,9% y
11,4%, respectivamente. El resto de ámbitos incrementan la producción
de viviendas hacia a un año antes, destacando los aumentos del Alt
Pirineu i Aran y de las comarcas centrales.
La evolución
comarcal de las viviendas iniciadas es muy heterogénea. Destacan
las cuatro comarcas más productivas, todas ellas de la provincia
de Barcelona, que representan el 62% de la producción total, y que
son el Barcelonès (3.685 iniciados), Vallès Occidental (2.211),
El Baix Llobregat (1.714) y el Maresme (1.345 viviendas), con comportamientos
dispares: mientras que el Barcelona y el Vallès Occidental disminuyen
su ritmo un 27,2%, y 12,1%, respectivamente, el Barcelonès aumenta
el 2,7% y el Maresme un 31,9%. Por otra parte, las comarcas con menos producción
muestran unos valores relativos más destacados, como es el caso
del Alto Urgell, Bages, Baix Penedès, La Cerdanya y el Ripollès,
con unos incrementos por encima del 200% anual.
La evolución
de las viviendas terminadas continúa con buen ritmo alcanzando los
8.831 viviendas, y un incremento del 17,9%. En este sentido, todas las
provincias de la comunidad obtienen resultados positivos en comparación
con un año antes, con la excepción de la provincia de Tarragona
que con 505 viviendas muestra una disminución del 44,4%. Destaca
el incremento de la provincia de Girona (+ 80,3%) seguido del de Barcelona
(+ 21,5%) y Lleida (+ 13,9%).
De las comarcas
más productivas de Cataluña cabe destacar un incremento importante
de las viviendas terminadas (Barcelona + 14,8%, Barcelonès + 19,7%,
Barcelona + 41,4%) con la excepción del Maresme que disminuye en
comparación con el año anterior un 31,2%. De todas las comarcas,
destacan con incrementos interanuales más significativos el Pallars
Sobirà y el Plan del Lago.
Por Ámbitos
territoriales, son las Comarcas de Girona (+ 74%) y el Alt Pirineu y Aran
(+ 59,2%) los que aumentan considerablemente en comparación con
el mismo periodo anterior y únicamente muestran disminuciones en
las viviendas acabados los ámbitos del Campo de Tarragona, las Comarcas
Centrales y las Tierras del Ebro (-53,3%, -22,4% y -22,0%, respectivamente).
Los últimos
datos de la ciudad de Barcelona -motor principal de la provincia-, muestran
síntomas de desaceleración de la actividad, principalmente
ante las últimas normativas legislativas. A cierre del ejercicio,
la ciudad, con 1.931 viviendas iniciadas muestra una ralentización
del -12,3% de las viviendas iniciadas en comparación con el 2018.
Cabe decir que, en el transcurso del año, el ritmo de la producción
de iniciados no superaba las 400 unidades hasta el repunte del cuarto trimestre
del año (con un incremento trimestral del 220%) alcanzando los 1.144
viviendas iniciadas (59% del total de las viviendas iniciadas 2019). La
producción de los acabados también ha sufrido una desaceleración
y disminuyen un 14,5%. Los distritos que incrementan espectacularmente
la producción son Sants-Montjuïc y Ciutat Vella, mientras los
que sufren una disminución más importante son San Martín
y San Andrés.
CONTINÚA
EL DINAMISMO DEL MERCADO HIPOTECARIO EN CATALUÑA
Tras años
de contracción, la sostenida recuperación de la actividad
económica y del mercado laboral de los últimos años
ha tenido su reflejo en el mercado inmobiliario, con un crecimiento del
número de hipotecas constituidas sobre viviendas de los últimos
años.
En el año
2019, representó en Cataluña un incremento suave del total
de las operaciones inscritas del 0,5% anual. En este primer trimestre del
año 2020, las concesiones de hipotecas muestran un repunte y aumentan
un 7% en comparación con el primer trimestre del año anterior.
Este buen resultado es principalmente consecuencia de la fuerte actividad
financiera del mes de febrero en el que también destaca considerablemente
el aumento del capital prestado, triplicando casi la media del capital
prestado a los meses de enero y de marzo. La evolución del importe
medio del crédito, muestra un resurgimiento superior al comportamiento
de la cantidad de las mismas, logrando el primer trimestre un crecimiento
del 64,5% en Catalunya.
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