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30 de enero
de 2015
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EL FINAL DEL CONVENIO URBANÍSTICO
DEL CORTE INGLÉS DE CÁCERES
Convertir conocimiento en
valor añadido:
Guía práctica inmoley.com de convenios urbanísticos
y guía del urbanismo de Extremadura. La operación en las
Carmelitas no fue aprobada por la comisión de Urbanismo del ayuntamiento
de Cáceres a pesar del recurso de reposición contra la aprobación
del plan especial para intervenir en la parcela, ya desestimada el pasado
septiembre. Según una sentencia del juzgado número 5 de Cáceres,
que afecta a El Corte Inglés y la promotora Estudios Urbanísticos
y Medioambientales procede la devolución al primero del importe
entregado a cuenta, un millón de euros, para el desarrollo urbanístico
de la parcela del solar que ocupa un colegio.
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Con esta sentencia, aunque recurrible,
se da por abandonada de manera definitiva la implantación de El
Corte Inglés en la ciudad, lo que ya había sido anunciado
por la propia empresa hace casi un año, en febrero de 2014, en una
carta de contestación dirigida al grupo municipal socialista del
Ayuntamiento, grupo que le había requerido, también por escrito,
que se pronunciara sobre sus planes de expansión en la ciudad de
Cáceres.
En la carta de contestación,
firmada por Dimas Gimeno, entonces director general de El Corte Inglés
y actual presidente de la compañía como sucesor de Isidoro
Álvarez, se afirmaba que el 10 de octubre de 2012 había expirado
el convenio que la empresa firmó en el año 2005 con la promotora
cacereña de la operación, Estudios Urbanísticos y
Mediombientales. El directivo recordó en la carta que en noviembre
de 2005 había firmado un acuerdo «en base a uno conjunto de
compromisos que no han alcanzado su cumplimiento» Por ello,. señalaba
que el 10 de octubre de 2012 «se resolvió el contrato con
la sociedad Estudios Urbanísticos y Medioambientales».
El entonces director general de
El Corte Inglés aludía en su carta a la crisis económica:
«la tramitación administrativa, fundamentalmente urbanística,
que no ha concluido, se sitúa desgraciadamente en coincidencia con
la crisis económica que soporta el país y, en particular,
en el ámbito del consumo y la distribución comercial. Es
por ello por lo que en estos momentos resulta particularmente difícil
concretar una previsión temporal de nuestra implantación
en la ciudad de Cáceres». Aquel convenio fue firmado a cuatro
bandas, entre el Corte Inglés, la empresa promotora, el Ayuntamiento
y la congregación de las Carmelitas, dueña del solar que
debía ser divido en varias áreas para distintos usos: viviendas,
nuevo colegio y El Corte Inglés.
La ruptura del acuerdo ha llegado
a los tribunales al reclamar El Corte Inglés su derecho a dar por
terminado el contrato por incumplimiento de las condiciones previstas y,
por consiguiente, a recibir el dinero que puso en su día, un millón
de euros, como pago para la parcela del solar que le correspondería
a su centro comercial, de 3.200 metros cuadrados de superficie y una edificabilidad
de 25.000 metros. La promotora local llegó a un acuerdo con la propiedad
del terreno, la congregación religiosa, para comprar el terreno,
de manera que una parte sería adquirida, a su vez, por El Corte
Inglés y otra se reservaba la promotora para hacer 100 viviendas,
además de construir un nuevo colegio.
No obstante, la operación
urbanística fue asumida después, tras los primeros pasos,
por otra empresa, Almonte, aunque El Corte Inglés hace valer sus
derechos ante la primera, con la que firmó el acuerdo de 2005 y
que es una de las partes en el litigio resuelto.
La operación urbanística
tiene su plan especial aprobado definitivamente desde septiembre de 2014,
después de que El Corte Inglés diera por roto el convenio,
pero todavía no se ha presentado el programa de ejecución.
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