Ya hace unas
semanas, en julio, la misma agencia utilizaba el mismo sistema para notificar
la orden de demolición de la obras de construcción de una
edificación para uso residencial en el lugar de Vilar, en la parroquia
de Santa Cristina de Cobres en Vilaboa. Entonces llegaba en medio de las
protestas de los vecinos y Concello, que piden la paralización de
las órdenes de derribo mientras no se apruebe un PXOM que podría
legalizar algunas de las viviendas afectadas.
Además
hay varios expedientes abiertos por esta agencia a lo largo de este año
y que se ha concretado en al menos cuatro demoliciones: una en Pontevedra,
otra en Caldas y dos en Sanxenxo.
Según
la pagina web de la APLU, hasta ahora se han llevado a cabo 64 derribos
este año en toda Galicia, de los que más de la mitad (34),
corresponden a la provincia de Pontevedra. Si en ejercicios anteriores
Sanxenxo solía encabezar el listado, por el momento son Cangas (siete
demoliciones) y Redondela (cinco) los más afectados, por delante
de Gondomar (cuatro), O Grove (tres), Soutomaior (dos), Tui (dos), Sanxenxo
(dos), y Caldas, Pontevedra, Oia, Bueu, Cambados, O Rosal, Tomiño,
Vilanova y Vigo, con una demolición en cada caso.
En Sanxenxo
se actuó en enero para la eliminación de una vivienda en
la zona de Major y en marzo para retirar varias caravanas estacionadas
en una zona marítimo-terrestre.
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