Según
explicó el concejal de Urbanismo, Vicent Sarrià, una de esas
medidas transitorias, que ahora deberá aprobar la conselleria, es
el establecimiento de un límite de 3 alturas para todas las construcciones.
En el plan del 88 se hablaba de la conveniencia de dos alturas, pero se
permitía construir hasta cinco, de manera que los técnicos
han entendido que lo prudente sería dejarlo en tres y establecer
limitaciones también para los áticos. Así mismo, se
establece una longitud de fachada máxima de 12 metros.
Por otra parte,
las normas transitorias garantizan la protección de todos los edificios
con un alto valor patrimonial. Al volver al Plan General de 1988 la Lonja
de Pescadores y toda la calle Eugenia Viñes pasa a estar bajo el
Plan de Protección del Paseo Marítimo y quedan sin protección
alguna la Casa de los Bous y la Fábrica de Hielo. Así pues,
para la Lonja se mantiene esa protección y para las otras dos construcciones
se impulsará una declaración especial que garantice su mantenimiento
y rehabilitación.
Por último,
del Pepri que ahora quiere derogarse se mantendrán también
determinadas unidades de ejecución que aportaban a la ciudad equipamientos
públicos importantes.
Estas medidas
estarán vigentes hasta que sea aprobado un nuevo planeamiento para
el barrio y se sienten las directrices de su recuperación. Son,
en cualquier caso, medidas que muy probablemente permanecerán de
forma definitiva, dijo Sarrià, quien aseguró que con la moción
aprobada ayer y que será ratificada en el próximo pleno se
desiste del Pepri y «se da paso a una nueva etapa».
CASA DEL BOUS
Del mismo modo,
ha resaltado la protección que se quiere seguir dando a bienes como
la Casa dels Bous o la Fábrica de Hielo. Vicent Sarrià ha
señalado también que por medio de esas normas se pretende
garantizar --se pedirá así a la Generalitat-- la continuidad
como espacios destinados a dotaciones públicas de algunas unidades
de ejecución que se contemplaban así en el Pepri y que "es
necesario mantener como tal.
El concejal
ha apuntado que esas normas afectarán también a la volumetrías
y las alturas ya que se pretende implantar --como se pedirá a la
administración autonómica-- "un máximo de tres alturas"
y que "los sobreelevados --"áticos retranqueados"-- no sobrepasen
determinada altura de cornisa". Ha precisado que será finalmente
la Generalitat quien decida sobre esta propuesta del Ayuntamiento.
Sarrià
ha añadido que para "proteger la trama urbana histórica del
Cabanyal" se ha decidido también "limitar el número de parcelas"
que se puedan agregar para una construcción y establecerlo en "un
máximo de doce metros de fachada". Asimismo, ha anunciado que se
ha constituido una "comisión técnica" "para trabajar los
pormenores" de toda la propuesta planteada para el Cabanyal.
ANULACIÓN
"PRECIPITADA"
Por su parte,
el portavoz del PP, Alfonso Novo, ha justificado el rechazo de su grupo
a la moción del gobierno local --al que se ha referido como "el
tripartito"-- al considerar que la anulación del Pepri planteada
es "precipitada" y "no está justificada su excepcionalidad". "Esta
actuación por decreto, propia de la izquierda, abre un proceso incierto
que, de momento, es muy poco transparente y nada participativo".
En este sentido,
Novo ha indicado que la "urgencia" para eliminar el Pepri "puede responder
al temor del tripartito a que el Ministerio de Cultura diga que la adaptación
a la orden --hecha por el PP-- salvaguarda los valores históricos-patrimoniales"
del Cabanyal y que quedara derogada "la orden ministerial decretada por
el gobierno del PSOE".
Igualmente,
ha señalado que dicho plan "está suspendido" actualmente
por la orden de Cultura y ha apuntado que "no cabe que la Generalitat lo
vuelva a suspender". Alfonso Novo ha censurado el "corta y pega de normas"
hecho por el gobierno local "para cubrir el requisito legal de suspensión
del planeamiento" y ha estimado una "involución a más de
25 años" pretender "recuperar el espíritu del PGOU" que tenía
"como objetivo irrenunciable la prolongación de Blasco Ibáñez"
por el barrio.
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