La construcción
de las terminales ferroviarias de los parques industriales Expacio Mérida
y Expacio Navalmoral obliga a calcular de nuevo el calendario de ejecución
de ambos proyectos. La Consejería de Fomento ha modificado los instrumentos
urbanísticos de los dos polígonos, en los que se actualiza
el plan de etapas. La conclusión del recinto emeritense se prolonga
hasta 2023, cinco años más de lo previsto tras la última
revisión, mientras que el Moralo se retrasa a 2021, quince meses
más de la modificación que tuvo lugar el pasado año.
Este cambio
lleva a modificar también la disposición de los viales, para
permitir los accesos a la terminal, así como siete parcelas situadas
junto a las instalaciones ferroviarias, de las cuales una desaparece. También
se aprovecha para otras cuestiones, como la fusión de la superficie
de dos solares dotacionales en uno solo.
Como recoge
el proyecto, que ahora se expone al público en la Consejería
de Fomento en la capital autonómica, la construcción de las
instalaciones ferroviarias obliga a modificar el plan de etapas de Expacio
Mérida. La terminal estaba prevista en la tercera fase, y ahora
se adelanta a la segunda para hacer más atractivo el parque empresarial.
Del mismo modo,
se actualiza el desarrollo previsto del proyecto. Se mantienen los plazos
de ejecución, pero se retrasa la fecha de inicio y, por tanto, la
de finalización. Ya concluida la primera fase de urbanización,
en el PIR en vigor se indica que la segunda fase comenzaría en enero
del pasado año y terminaría en el presente ejercicio. Ahora
se plantea que arrancará en 2017 y concluirá un año
después.
El resto de
fases se iba a acometer de forma continuada. Sin embargo, ahora se recoge
un parón de dos años entre la segunda y la tercera fase.
En consecuencia, si la quinta y última entrega debía estar
lista en 2018, con la nueva redacción se traslada a 2023. La ocupación
completa tendría lugar en 2025.
NAVALMORAL
En el parque
Expacio Navalmoral sucede lo mismo por el mismo motivo. El PIR también
se aprobó en 2008 y se modificó el pasado año para
incluir el acceso desde la A-5, lo que se tradujo en un nuevo plan de etapas.
Ahora se decide
adelantar la construcción de la terminal ferroviaria, que estaba
prevista para la tercera fase y que se acometerá en la segunda de
las cuatro previstas. En conclusión, es necesario fijar un nuevo
calendario de ejecución.
La modificación
aprobada el pasado año planteaba concluir la segunda entrega de
la primera fase de urbanización en un plazo de 12 meses y terminar
en diciembre de 2013. Ahora se actualiza su duración y se eleva
a 27 meses, con lo que no finalizaría hasta marzo de este año.
Las otras tres
fases tenían una duración de 24 meses cada una y se ejecutarían
una tras otra, con lo que concluirían en diciembre de 2019. Se mantiene
su desarrollo, pero como se añaden 15 meses a la primera entrega,
la urbanización completa se aplaza a marzo de 2021.
Además,
la terminal que se plantea obliga a suprimir 30.600 metros cuadrados de
zonas verdes. Con esta medida no se alcanzaría el límite
legal que obliga a destinar a este uso el 10% de la superficie del parque.
Pero se compensa dedicando a este fin una parcela de reserva ferroviaria
que ya quedará sin utilidad con el nuevo planteamiento.
Los proyectos
Expacio Mérida y Expacio Navalmoral nacieron en 2006 como Parque
de Desarrollo Industrial Sur de Extremadura y Norte de Extremadura, respectivamente.
Se dieron a conocer en 2007 y un año después se aprobaron
los instrumentos urbanísticos. Las obras de la primera fase tuvieron
lugar entre 2009 y 2011 (con varios meses de retraso en ambos casos). De
forma paralela se inició la comercialización del suelo, que
se ha visto lastrada por la crisis económica. Por el momento no
hay ninguna empresa instalada en estos recintos, pero ya hay parcelas vendidas
e instalaciones en obras.
La inauguración
oficial de la primera fase del parque moralo tuvo lugar a finales de 2012
tras una inversión de 36,5 millones de euros y la urbanización
de 1.270.000 metros cuadrados. La primera entrega del recinto emeritense,
con 630.000 metros cuadrados urbanizados y un coste de 27 millones de euros,
se presentó en febrero de 2013.
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