| El edificio
de la calle Sepúlveda tiene una superficie de 11.569 m2 y está
ocupado por la Dirección General de Empleo y Relaciones Laborales.
Ante la imposibilidad
de venderlos en la subasta pública realizada el año
pasado, La Generalitat ha llevado a cabo la operación de forma directa.
El comprador,
cuyo nombre no ha trascendido, ha abonado ya el 25% del importe, aunque
la operación deberá ser aprobada por el Gobierno catalán
en el consejo ejecutivo. En el primer caso, la Generalitat tiene la obligación
de quedarse como inquilina durante 20 años y pagará 1,46
millones anuales de alquiler. El nuevo propietario, en cambio, podría
rescindir el contrato dentro de tres años. El edificio tiene una
superficie de 10.045 metros cuadrados, repartidos en diez alturas más
dos plantas de sótano.
El edificio
de la calle Sepúlveda tiene 11.569 metros cuadrados y contempla
todos los usos: comercial, oficinas, residencial y hotelero. La Generalitat
firmará un contrato de obligado cumplimiento de un año, en
el que pagará 1,33 millones de alquiler, y el futuro propietario
tiene un periodo de arrendamiento obligatorio de tres años.
Estos edificios
trataron de venderse el año pasado en subasta, pero ésta
quedó desierta, por lo que se inició un proceso de venta
directa que establecía, como importe mínimo, el precio de
la segunda subasta: 63,49 millones. Fuentes cercanas a la operación
indicaron ayer que el precio conseguido podría situarse ligeramente
por encima de este importe.
La Generalitat
no ha conseguido vender todavía la sede de la Bolsa de Barcelona.
El principal impedimento es que el gobierno catalán no ha conseguido
que la Bolsa, que tiene un derecho de usufructo hasta 2023, aceptara trasladarse
a otra ubicación, por lo que trata de vender el edificio por 71
millones de euros con el inquilino dentro. Será el futuro propietario,
si se vende, quien se encargue de negociar con él.
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